XVIII Jornadas Nacionales PROSAC. SAMARITANOS PARA TIEMPOS DE CRISIS

XVIII Jornadas Nacionales PROSAC

Palencia nos recibió con tiempo frío pero con una acogida cálida en el Salón de Actos de la Diputación Provincial de Palencia donde se desarrollaron las Jornadas. Tras las palabras de bienvenida y gratitud de Manuel de Reyes, Presidente de PROSAC, y de acogida y felicitación del Delegado de la Junta de Castilla y León en Palencia, el Teniente de Alcalde y concejal de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Palencia, el Diputado de Servicios Sociales de la Diputación, D. Rafael Palmero, obispo responsable del Departamento de Pastoral de la Salud les dio las gracias y abrió las Jornadas.

Tras la oración inicial, Luis González-Carvajal, profesor emérito de Teología moral, puso rostro a los caídos en el camino en esta crisis. Marta López, enfermera y teóloga, nos mostró la figura de Jesús Buen Samaritano, cuidador de la Humanidad, que se hace nuestro hermano y nos invita a cuidar al enfermo. Pero también él, herido y acosado, cuenta con la mujer que con el perfume le reconoce y le acompaña en el camino de su entrega.

En la tarde escuchamos a testigos samaritanos de hoy. Patricia, enfermera, que en sus veranos asiste como voluntaria a campamentos en el que se relacionan niños sanos y con discapacidad intelectual. Sor Natividad, Hospitalaria del Sgdo. Corazón, nos habló de tres proyectos n marcha: la Unidad de la Rosa en el Complejo Hospitalario San Luís de Palencia para siete pacientes con discapacidad psíquica y graves alteraciones de conducta, la Fundación María Josefa Recio para atender la tutela de Enfermos Mentales que lo necesitan y el proyecto en el Centro Aita Menni de Mondragón para atender a enfermos mentales con penas de prisión. El Hno. Cecilio hizo un repaso histórico de la presencia de la Orden de San Juan de Dios en Palencia y de la atención que hoy dispensa su centro. Esther Maldonado, pediatra y monitora de Confirmación, narró su experiencia con los padres Guanelianos en Guatemala. Por último, Teresa, médica de atención primaria en un pueblo y catequista de Confirmación, nos relató su compromiso cristiano como profesional de la salud en el medio rural.

Tras el descanso los participantes, reunidos en grupos, pudieron examinar la realidad, compartir las manifestaciones de la crisis en nuestros trabajos, analizar los conflictos morales y ver signos de esperanza que se atisban. El trabajo resultó intenso, constructivo e interpelante.

Nos tocaba llevar la vida en la celebración de la Eucaristía en el marco incomparable de la Catedral de Palencia. Presidió el Hno. José Luis Redrado, exsecretario del Pontificio Consejo para la Pastoral de la Salud. Con palabras vibrantes nos invitó a afrontar la situación actual imitando a Jesús. Finalizada la Eucaristía visitamos la cripta de la catedral.

La intensa jornada culminaba con la cena y la actuación musical del cantautor zamorano Rogelio Cabado, un canto de gratitud y homenaje al la labor de los profesionales sanitarios.

Iniciamos la segunda jornada con la oración de María, Buena Samaritana, preparada por José María Rubio. El Hno. José Luis Redrado, con su pasión y gestos vigorosos nos alentó a hacernos prójimos del que sufre.
Tras el descanso volvimos a escuchar nuevos testimonios que nos conmovieron. Julián del Olmo, sacerdote, periodista y director de Pueblo de Dios, nos mostró el testimonio de los misioneros, samaritanos de corazón y compromiso no de “oficio” que apuestan por la vida de los más pobres y sanan con el corazón. “Tenemos que aprender de ellos –nos dijo- a ser personas de referencia en nuestro entorno.” Seguidamente Sor Isabel Bello, Hija de la Caridad, nos abrió la Casa de Belén, que ella dirige, para que pudiéramos contemplar cómo son queridos y cuidados las niñas y niños enfermos que viven felices y mueren en paz.

En el Taller de recursos, José Carlos Bermejo, religioso Camilo, presentó la resiliencia como camino para afrontar y crecer en el sufrimiento y Juan Manuel Bajo, delegado de Pastoral de la Salud de Tortosa, nos propuso varias películas que recogían actitudes samaritanas en el cine.

A la tarde tuvimos dos regalos turísticos de Palencia: la visita a la Villa romana de La Olmeda y la visita a la Iglesia de Villalcázar de Sirga. En ella celebramos la eucaristía, presidida por D. Esteban, Obispo de Palencia. Nos acompañaron con sus cantos una comunidad de Agustinas jóvenes que atienden el alberge del Camino de Santiago de Becerril de Campos. Vimos allí la Compasión sin fronteras al encontrarnos con una peregrina surcoreana, otro húngaro y la gente del pueblo, acogedora y amable.

Iniciamos la última jornada con la oración preparada y dirigida por Arturo Fuentes, que nos invitó a unirnos a Pedro y a la necesidad de fiarnos de Jesús ante los nuevos retos.

Una vez presentada la síntesis del trabajo de grupos y sugerencias sobre su difusión, se inició la Asamblea general de la Asociación D. Rafael nos animó y alentó a seguir adelante, a pesar de las dificultades, en el nombre del Señor siendo dóciles a lo que El nos pide y se manifiesta en la Iglesia. Expresó el deseo de que se incorporen jóvenes con ilusión, esfuerzo.

Acabamos las jornadas con la eucaristía –escuela de amor donde aprendemos todos a ser samaritanos- en la Catedral de Palencia. En la homilía, Mons. Palmero, invitó a los profesionales ser custodios de todos, pero especialmente de los más pobres y les recordó que su identidad ha de manifestarse en la misericordia, que ayuda a mirar al enfermo con ojos de fe y genera amor, en la responsabilidad y en la caridad, que pide hacerse solidarios con él con amor y por amor.

Iñaki Mardones, Delegado de Pastoral de la Salud de Santander