ACOMPAÑAR EN EL SUFRIMIENTO.
Como todos los años, tras la instauración de esta Jornada por el Papa Juan Pablo II, el día 11 de febrero, festividad de la Virgen de Lourdes, la Iglesia celebra el día Mundial del Enfermo.
El mensaje para la Jornada de este año que nos lanza Papa Francisco para este día, es “Sean misericordiosos, como su Padre es misericordioso“, el Papa nos invita a ser misericordiosos, siendo signo e instrumento de misericordia, teniendo en mente al buen samaritano, y haciendo de nuestro centros e instituciones dedicadas a la atención y cuidado de los enfermos, de los vulnerables y necesitados auténticas posadas del Buen Samaritano. Desde se preste cuidado y atención; donde se den niveles excelsos de calidad técnica, pero también de calidad humana, de calor y de relación interpersonal constructiva y enriquecedora. Verdaderos lugares de acogida.
Sin olvidar que la mayoría de las personas enfermas están en sus domicilios, aquí la actividad está liderada por los profesionales de Atención Primaria, profesionales sanitarios entregados a hacer más fácil la vida de los enfermos y sus cuidadores.
Es un día para pensar en cultivar la misericordia como actitud básica de todos los que nos movemos en torno al mundo de la salud y la enfermedad.
Vida Nueva ha publicado testimonio de profesionales sanitarios que suponen una reflexión sobre cómo se lleva a cabo el trabajo y se entiende como vocación, una llamada De Dios para hacerse presente en el mundo de la salud y la enfermedad. Editorial.
Ana Sierra Losada: “Tengo una vocación más allá de la medicina y es la de la alegría”
José María Civeira: “El contacto personal con el paciente es una gracia”
Jaime Gutiérrez del Álamo: “Atender a un paciente pediátrico es ‘pisar terreno sagrado’ de una familia”
Claudia Alvargonzález Riera: “Lo peor de la enfermedad, más allá de la muerte, es la soledad”
Mónica de Diego: “Me he humanizado más si cabe al centrarme en los demás”
Teresa Reinoso Lozano: “Mis compañeros me hicieron ver que el Amor es lo que da sentido a todo”
Pilar Bohórquez: “Hay días duros, pero Dios me sigue llamando a ser médica de familia”
Patricia Fraga: “Tardé semanas en ver a Dios en este nuevo enfermo, en su sufrimiento y en su soledad”
Rebeca Fuerte Martínez,“Cuando estoy con un paciente siento que estoy ante un sagrario”
Sara Carbajal Tinoco: La fe, el mejor escudo de los sanitarios cuando ya no hay aplausos